Del 14 de junio al 15 de julio está transcurriendo la fiesta más grande del “deporte más lindo del mundo”: la Copa Mundial de Fútbol. Así se escucha. Así lo sienten millones de personas en todas las dimensiones del globo. Así lo dicen los que tienen voz alta: la FIFA, las federaciones nacionales, cadenas de televisión privadas, televisoras estatales –como la cubana. Así lo aseguran las hinchadas. La retórica del evento refrenda la celebración del deporte más universal: el que activa más fibras del alma casi al margen de pertenencias políticas, culturales, de clase, de “raza”. La observación lo confirma, al menos como tendencia. Quienes el 13 de junio parecían…